La orden de Calatrava fue fundada en el siglo XII por el abad Raimundo de Fitero, para proteger la zona, repoblarla y darle seguridad, una vez que la Reconquista avanzó hacia el sur. La orden tendrá múltiples atribuciones, que ejercerá en nombre del rey, quien delegó parte de la responsabilidad de la zona en la misma. En un principio el territorio fue entregado a la orden del Temple, pero luego esta le devolvió la zona a Sancho III. El abad de Fitero aceptó el reto de cumplir el encargo de dar seguridad a la zona, para lo cual en poco tiempo puso en pie de guerra un ejército de más de 20.000 hombres, mitad monjes mitad soldados. Con posterioridad se eligió al responsable de la misma, el maestre, siendo designado como primer maestre Don García. Los calatravos hacían los tres votos religiosos (obediencia, castidad y pobreza), además guardaban silencio en el dormitorio, refectorio (comedor) y oratorio; ayunaban cuatro días a la semana, dormían con su armadura, y llevaban, como única vestimenta, el hábito blanco cisterciense con una sencilla cruz negra «flordelisada» (luego roja, a partir del siglo XIV), que en el siglo XVI se configuró definitivamente como hoy se conoce, y que aparece en el escudo de Almagro. La sede de la orden estuvo inicialmente en la fortaleza de Calatrava la Vieja, en la actual zona de Carrión de Calatrava, cuyo castillo se está reconstruyendo, para luego pasar a la fortaleza de Calatrava la Nueva (1218) y Almagro. Las razones del cambio de lugar guardan relación con las malas condiciones geográficas de la zona, insalubre y plagada de lagunas, hasta donde llegaban las Tablas de Daimiel. Las ciudades que estuvieron bajo el dominio de la orden fueron muchas, la mayoría de las que aparecen incluidas en la zona del actual Campo de Calatrava y algunas más que con el paso del tiempo dejaron de ser de la orden (Porcuna, Vívoras, Alcaudete, Fuente Obejuna, Lopera, Arjona, etc.). Entre las más importantes hay que destacar: Almagro, Calzada, Aldea del Rey, Granátula, Carrión, Bolaños, etc. Lugares obligados en esta ruta son el Castillo de Calatrava la Vieja, ubicado en las estribaciones de las Tablas de Daimiel, era lugar de paso entre Toledo y Córdoba, y la principal fortaleza del valle medio del Guadiana.
La fortificación se encuentra en un cerro amesetado desde donde se controla el cruce del río Guadiana en su confluencia con el arroyo Valdecañas. Fue una fortaleza árabe desde el siglo VIII y su etapa de mayor esplendor fue durante el siglo IX. Con la caída del califato cordobés, su dominio fue disputado por diversas taifas (Toledo, Córdoba y Sevilla). En el 1147 pasó a manos cristianas durante el reinado de Alfonso VII, convirtiéndose en la plaza cristiana más avanzada del sur. Sancho III, como hemos dicho, entregó el castillo a los templarios y luego al abad de Fitero.
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Para visitar el lugar se puede contactar con el Ayuntamiento de Carrión de Calatrava. Plaza de la Constitución s/n Tel.- 926 814 081.
Alarcos constituye uno de los conjuntos arqueológicos medievales más importantes de España. El castillo está construido sobre una plataforma artificial. Posee una planta rectangular y tiene nueve torres, siete cuadradas y dos pentagonales. La zona había sido ocupada por otras culturas con anterioridad (íberos y romanos). Reconquistada por Alfonso VII en 1147, se reedificó por Alfonso VIII y se encomendó su defensa a la orden de Calatrava.
El 19 de julio de 1195 fue escenario de la famosa batalla que lleva su nombre y que supone una derrota del ejército cristiano frente a las tropas almohades de al-Mansur (esta batalla tuvo lugar en la llanura que hoy se extiende entre Alarcos y Poblete y de la que se han recuperado importantes restos arqueológicos). Años más tarde, en 1212, y gracias a la victoria de las Navas de Tolosa, se dio paso a la definitiva conquista y repoblación de La Mancha. A partir de esta fecha comienza el declive de Alarcos. Alfonso X es incapaz de repoblarla por lo que traslada a sus habitantes a una aldea próxima, llamada Pozo Seco de Don Gil y allí fundó Villa Real en 1255.
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Para contactar: castillo de Alarcos (Oficina de Turismo de Ciudad Real-Alarcos, 21 Tel.- (926) 200 037; Parque Arqueológico de Alarcos Calatrava Carretera de Poblete a N-430 Tel.-( 926) 666 057).
Castillo de Calatrava la Nueva tiene su origen en el avance de la Reconquista hacia el sur, tras la batalla de las Navas de Tolosa (1212), consolidando la zona de Sierra Morena como la frontera natural entre los reinos cristianos y árabes en el siglo XIII. El traslado de la orden se produjo en 1217. La fortaleza está recientemente restaurada y posee importantes dependencias como la iglesia, de estilo gótico con reminiscencias románicas y mudéjares, tiene un amplio rosetón en la fachada principal y está reforzada con contrafuertes laterales; goza de tres naves, la central más elevada y grande que las laterales. El castillo posee plaza de armas, torre del homenaje y murallas defensivas.
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Para la visita hay que contactar con el Ayuntamiento de Aldea del Rey y el horario es el siguiente: de abril a septiembre: (lunes cerrado) martes a viernes de 11 a 14 y de 17,30 a 20,30; Sábados de 10 a 14 y de 17,30 a 20,30; Domingos de 10 a 14 y de 17 a 21. De octubre a marzo: (lunes cerrado) martes a viernes de 11 a 14 y de 16 a 18; sábados de 10 a 14 y de 16 a 18; domingos de 10 a 18. Teléfonos de contacto: 926 69 31 19 926 86 69 10.
Visita al Palacio Maestral de Almagro, actual Museo Nacional del Teatro. Inicialmente fue un pequeño castillo árabe en torno al que surge la ciudad, y del que quedan restos en la parte del patio, aunque fueron tapados tras la restauración. Instalados los maestres en el edificio lo ampliaron, abarcando toda la manzana actual de la iglesia de los jesuitas, el mercado, y el antiguo cuartel de Caballería, creado por Fernando VI a expensas del mismo. Fue la sede de la orden de Calatrava, tras su salida de Calatrava la Vieja, y en él se celebraron cortes por Alfonso X el Sabio, además de capítulos generales de la misma. Fue residencia de los maestres y de los gobernadores del Campo de Calatrava.
El edificio ha sufrido múltiples transformaciones y mutilaciones espaciales, como hemos indicado. Con la desamortización decimonónica el edificio pasó a manos de particulares, quien lo convirtieron en casino de la ciudad hasta los años setenta del pasado siglo XX, dándole una pátina neoclásica, que actualmente ha desaparecido. El edificio lo adquirió el Ayuntamiento de Almagro a la fundación Poncemar y posteriormente fue cedido al Ministerio de Cultura para sede del Museo Nacional del Teatro. Lo más interesante del edificio, con tantos avatares, es el patio de estilo mudéjar y arcos de ladrillo túmidos, con elementos romanos y visigodos reaprovechados. La planta superior está formada por una galería con balaustrada de madera y artesonados grabados a fuego y policromados. Castillo de Doña Berenguela está ubicado en el pueblo de Bolaños de Calatrava. Era una pequeña fortaleza fronteriza, de ahí su reducido tamaño, aunque seguramente originariamente tuviera mayor extensión. Doña Berenguela, madre de Fernando III el Santo, lo donó a la orden de Calatrava y Alfonso X el Sabio corroboró esa donación. La orden se hizo cargo del castillo hasta 1544, momento en que lo abandonó. El edificio era de la Diputación Provincial, quien lo restauró. En la actualidad el edificio se ha funcionalizado, conserva patio de armas, torre del homenaje y resto del foso.
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Para contactar se puede llamar al teléfono (926) 866 910 del Ayuntamiento de Bolaños de Calatrava y al (926) 261 257. Los horarios de visita son los siguientes: de noviembre a marzo de lunes a domingos 11.00 a 14.00 y 16.00 a 18.00; de abril a junio de lunes a domingos 11.00 a 14.00 y 16.00 a 19.00; de julio a agosto, de lunes a domingo 11.00 a 14.00 y 18.00 a 21.00; de septiembre a octubre, de lunes a domingo 11.00 a 14.00 y 16.00 a 19.00
Castillo de los calatravos de Calzada de Cva.
Castillo de Doña Berenguela
Vista aérea del Parque Arqueológico de Alarcos
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